Violive es una empresa que nace en el Valle del Huasco que usa las aceitunas en un formato innovador y versátil, transformándolas en nutritivos aderezos.

En el año 2013, Pablo Carvajal junto a Clara Ossandón comenzaron a desarrollar la idea de un proyecto enfocado en la alimentación saludable con un aporte social. Es así como al año siguiente postularon al Capital Semilla de Sercotec, con el objetivo de crear una tienda online para luego poder tener su propio negocio en el comercio formal. 

Sin embargo, introducir un concepto de comida saludable y gourmet no fue fácil. “Las personas vinculan lo sano con lo caro. Existe un prejuicio y fue una de los obstáculos que debimos enfrentar”, dice Pablo Carvajal, uno de los socios de Violive. Dos años más tarde y tras probar diversos prototipos nació  “Violive”.

Clara Ossandon, socia de “Violine” fue quien implementó la digitalización y el uso del lenguaje moderno para mostrar el valor del trabajo de los pequeños ovicultores de Atacama y acercar el producto al cliente por medio de la tecnología. Gracias al apoyo de Corfo ella y Pablo lograron desarrollar plataformas que han sido claves en la difusión de esta nueva forma de dar sabor a las comidas. 

Pablo Carvajal y Clara Ossandón
Violive

"Las redes sociales son claves para dar confianza a los usuarios en compras digitales."

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